Por qué nos entercamos en querer enamorarnos igual que en la literatura o peor aún igual que en las películas? Aquí va otro discurso más en contra de la televisión. Qué tendrá esa caja proveedora de felicidad con capa entérica que nos tiene tan idiotas a todos, un tanto más a mi. La cuestión en realidad es sobre la manera como ahora construimos la fantasía del amor debido a las imágenes, a las historias que nos muestra. Pareciera que el hombre es más semejante como sociedad, tenemos mayores mitos y no somos tan particularizados como pensábamos.
El cuestionamiento surge después de ver un par de películas que tratan el tema del amor contemporáneo. Evidentemente el enfoque es totalmente opuesto, por un lado un filme americano con finalidades comerciales con mucho éxito Hitch, (Andy Tennat, 2005) en la que participa Will Smith. Así que desde aquí se puede intuir una obra ligera cargada de comedia y romanticismo que funciona bien para pasar el rato y no pensar mucho.
Sin embargo, antes de ver ésta película había visto 9 songs (Michael Winterbottom, 2004) ya en sí la primer diferencia marcada es el país de origen, Inglaterra mientras que la de W. Smith es de los Estados Unidos. Además de ser un filme independiente y su propuesta visual es agresiva, caso contrario en Hitch, donde hay un tratamiento más “moral” de la imagen. En sí el género al que podriamos ubicar ambas películas debido a su apartado “literario” es la comedia para Hitsch y el drama para 9 songs, lo cual nos determina otra gran diferencia y desde la cual sería imposible hacer una comparación. O en todo caso la comparación es absurda. Lo cual vuelve más estúpido mi intento por explicar mis ideas. Mejor…hasta luego.
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